TIPOS DE ANESTESIA - General, Local y Raquidiana y Peridural
La anestesia es un procedimiento médico que pretende bloquear temporalmente la capacidad del cerebro de reconocer un estímulo doloroso. Gracias a la anestesia, los médicos son capaces de realizar cirugías y otros procedimientos invasivos sin que el paciente sienta dolor.
En este texto vamos a explicar brevemente cuáles son los tipos más comunes de anestesia en la práctica médica, incluyendo las anestesias generales, peridural, raquídea y local.
Sensación de dolor
Para entender cómo funcionan las anestesias, vale la pena una rápida explicación sobre lo que es el dolor.
El dolor es uno de los mecanismos de defensa más importantes de nuestro organismo, siendo activada cada vez que un tejido nuestro está sufriendo algún tipo de estrés o injuria.
Inicialmente, puede parecer extraño pensar que un mecanismo que sirve para protegernos provoque una sensación tan mal como el dolor. Pero, piense bien, si usted se apoya en una superficie muy caliente, su cerebro necesita avisarle para retirar la mano lo más rápido posible, antes de que usted sufra quemaduras graves. La mejor manera para que usted responda inmediatamente, sin pensar y sin cuestionar, es hacerle sentir que aquella acción de golpear en el calor sea algo extremadamente incómodo. Con el dolor, usted no sólo va a retirar la mano lo más rápido posible, como no querrá ponerla de vuelta en absoluto.
Para poder sentir dolor, hay que haber receptores para identificar lesiones de los tejidos y nervios sensitivos especializados en transportar la sensación de dolor. Nuestra piel, por ejemplo, es ampliamente inervada por nervios sensitivos capaces de reconocer eventos traumáticos mínimos. Cuando sufren un corte, una quemadura, una picadura o cualquier otra injuria del tejido de la piel, estos nervios se activan, enviando rápidamente señales eléctricas hacia la médula espinal, que a su vez, los transporta al cerebro, donde la sensación de el dolor es reconocido.
Por lo tanto, si queremos bloquear la sensación de dolor, podemos actuar en tres puntos:
1. En el lugar exacto donde la injuria está ocurriendo, a través del bloqueo de los receptores del dolor presentes en la piel.
2. En la médula espinal, bloqueando una señal dolorosa proveniente de un nervio periférico, impidiendo que el mismo continúe su trayecto y llegue al cerebro.
3. En el cerebro, impidiendo que el mismo reconozca las señales dolorosas que llegan a sí.
Estos tres modos de actuar sobre el dolor son los mecanismos básicos de la anestesia local, regional y general, respectivamente.
Objetivos de la anestesia
El objetivo principal de cualquiera de las tres modalidades de anestesia es bloquear la sensación de dolor.
En los procedimientos simples, en los que sólo una anestesia local es necesaria, el único objetivo del procedimiento es incluso cortar el dolor. Sin embargo, en casos de cirugía, principalmente las de gran porte, no basta con retirar el dolor. En estos, el procedimiento anestésico también tiene otras funciones, como bloquear la musculatura del paciente, impidiendo que el mismo se mueva durante la cirugía, y provocar amnesia, haciendo que el paciente se olvida de buena parte de los acontecimientos durante la cirugía, aunque él mismo permanezca despierto durante el acto quirúrgico.
Tipos de anestesia
Como ya se ha mencionado, existen básicamente 3 tipos de anestesia: general, regional y local. Vamos a hablar brevemente sobre cada una de ellas.
1. Anestesia general
La anestesia general es la modalidad anestésica indicada para las cirugías más complejas y de gran porte. Indicamos la anestesia general cuando el procedimiento quirúrgico es muy complejo, no siendo viable anestesiar sólo una región del cuerpo. Es importante notar que el tipo de anestesia indicado para cortes en la piel es completamente diferente de la anestesia que necesita ser hecha cuando se va a cortar una parte del intestino o retirar un órgano del abdomen. En cirugías extensas no es posible bloquear diferentes capas y tejidos de los organismos sólo con anestésicos locales.
En la anestesia general, el paciente queda inconsciente, incapaz de moverse y, habitualmente, intubado y acoplado a un respirador artificial. Uno de los motivos del paciente no sentir es por el hecho de que está profundamente sedado, como si el cerebro estuviera parcialmente "apagado" (lea: ¿QUÉ ES EL COMA INDUCIDO?).
Existe el mito de que la anestesia general es un procedimiento anestésico peligroso. No es verdad. Actualmente, la anestesia general es un procedimiento bastante seguro. En la mayoría de los casos, cuando el paciente sometido a una cirugía extensa presenta complicaciones, el motivo no es la anestesia general. Las complicaciones son generalmente derivadas de enfermedades graves que el paciente ya poseía, como problemas cardíacos, renales, hepáticos o pulmonares en etapa avanzada, o por complicaciones de la propia cirugía, como hemorragias o lesión / quiebra de órganos vitales.
En pacientes sanos, la tasa de complicación de la anestesia general es de sólo 1, 4 por cada 1 millón de cirugías. Por lo tanto, problemas con la anestesia general son similares a los accidentes de avión: son raros, pero asustan, porque cuando ocurren, hay una intensa exposición en los medios de comunicación, llevando a la falsa impresión de que son frecuentes.
Si desea conocer más detalles sobre la anestesia general, tenemos un artículo exclusivo sobre este tipo de anestesia: ANESTESIA GENERAL - ¿Cuáles son los riesgos?
Asegúrese de ver también el video "La anestesia general es peligroso?" Publicado en nuestro canal de YouTube (haciendo clic en la imagen de abajo, el video se abrirá en otra ventana).
2. Anestesia regional
La anestesia regional es un procedimiento anestésico usado en cirugías más simples, donde el paciente puede permanecer despierto. Este tipo de anestesia bloquea el dolor en una determinada región del cuerpo, como un brazo, una pierna o toda la parte inferior del cuerpo, debajo del abdomen.
Los dos tipos de anestesia regional más utilizados son:
- Anestesia raquídea (o raquianestesia).
- Anestesia peridural.
2a. Anestesia raquídea
Para realizar la anestesia raquídea, una aguja de pequeño calibre se inserta en la espalda, para alcanzar el espacio subaracnoide, dentro de la columna espinal. A continuación, un anestésico se inyecta dentro del líquido espinal (licor), produciendo entumecimiento temporal y relajación muscular.
La presencia del anestésico dentro de la columna espinal bloquea los nervios que pasan por la columna lumbar, haciendo que estímulos dolorosos venidos de los miembros inferiores y del abdomen no consigan llegar al cerebro.
La raquianestesia es muy utilizada para procedimientos ortopédicos de miembros inferiores y para cesáreas.
2b. Anestesia peridural
La anestesia peridural es muy similar a la anestesia raquídea, pero hay algunas diferencias:
1. En la anestesia peridural el anestésico es inyectado en la región peridural, que queda alrededor del canal espinal, y no propiamente dentro, como en el caso de la raquianestesia.
2. En la anestesia peridural, el anestésico es inyectado por un catéter, que es implantado en el espacio peridural. Mientras que en la raquianestesia el anestésico es administrado por una aguja una sola vez, en la peridural el anestésico se está administrando constantemente a través del catéter.
3. La anestesia peridural puede seguir siendo administrada en el postoperatorio para controlar el dolor en las primeras horas después de la cirugía. Basta con mantener la infusión de analgésicos por el catéter.
4. La cantidad de anestésicos administrados es mucho menor en la raquídea.
La anestesia peridural se utiliza comúnmente durante el parto normal.
La complicación más común de las anestesias raquídeas y peridurales es el dolor de cabeza, que ocurre cuando hay extravasación de liquor por el agujero hecho por la aguja en el canal espinal. Esta pérdida de líquido provoca una reducción de la presión del liquor alrededor de todo el sistema nervioso central, siendo esta la causa del dolor de cabeza. Para saber más sobre la cefalia post-ráqui, lea: CEFALEIA POST-RAQUI O PUNTO LOMBAR
3. Anestesia local
La anestesia local es el procedimiento anestésico más común, siendo utilizado para bloquear el dolor en pequeñas regiones del cuerpo, habitualmente en la piel. A diferencia de las anestesias generales y regionales, que deben ser administradas por un anestesiólogo, la anestesia local es usada por casi todas las especialidades.
La anestesia local se realiza habitualmente con la inyección de lidocaína en la piel y los tejidos subcutáneos. Se utiliza para bloquear el dolor en una variedad de procedimientos médicos, como biopsias, punciones de venas profundas, suturas de la piel, punción lumbar, punción de líquido ascítico o de derrame pleural, etc.
La anestesia local también puede ser hecha a través de gel o spray, como en los casos de las endoscopias digestivas, donde el médico aplica un spray con anestésico local en la faringe para disminuir la molestia por el paso del endoscopio.
La anestesia local funciona bloqueando los receptores para dolor en la piel y los nervios más superficiales, impidiendo que los mismos consigan enviar señales dolorosas al cerebro.
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